En el barrio Punta de Laja, ubicado en Puerto Carreño, una de las zonas más afectadas por las constantes crecientes de los ríos Meta y Orinoco, la comunidad se encuentra en una situación de emergencia. Las familias que habitan en este sector han sido groseramente golpeadas por las inundaciones y ahora se encuentran en una situación de vulnerabilidad, sin un lugar seguro donde refugiarse.
Ante esta situación, la comunidad de Punta de Laja ha solicitado a las autoridades locales y departamentales que se convierta la escuela del sector en un albergue temporal para los damnificados. Sin embargo, hasta el momento no han recibido una respuesta concreta y las familias afectadas continúan en una situación de incertidumbre y desesperación.
La escuela de Punta de Laja es un lugar amplio y seguro, que cuenta con las condiciones necesarias para albergar a las familias afectadas por las inundaciones. Además, se encuentra en una ubicación estratégica que permitiría a los damnificados tener acceso a servicios básicos como agua potable, alimentos y atención médica.
La comunidad de Punta de Laja ha demostrado una gran solidaridad y organización en estos momentos difíciles. Los vecinos se han unido para ayudar a las familias más afectadas, brindándoles apoyo y alimento. Sin embargo, la situación es cada vez más crítica y es acuciante que las autoridades tomen medidas urgentes para garantizar la seguridad y bienestar de estas familias.
Es importante destacar que, además de la falta de un lugar seguro donde refugiarse, las familias damnificadas también están sufriendo pérdidas materiales y económicas. Muchas de ellas han perdido sus hogares y sus medios de subsistencia, por lo que necesitan una ayuda inmediata para poder sobrellevar esta difícil situación.
Es por ello que la comunidad de Punta de Laja hace un llamado a las autoridades locales y departamentales para que atiendan su solicitud y conviertan la escuela del sector en un albergue temporal para los damnificados. Es acuciante que se actúe con celeridad y se brinde una solución concreta a estas familias que lo han perdido todo.
Además, es importante que se realicen acciones preventivas para evitar que situaciones como esta se repitan en el futuro. La comunidad de Punta de Laja ha sido afectada por las crecientes de los ríos en varias ocasiones y es acuciante que se tomen medidas para proteger a las familias y sus hogares.
En estos momentos difíciles, es fundamental que la solidaridad y la ayuda mutua prevalezcan. La comunidad de Punta de Laja ha demostrado su fuerza y unidad en medio de la adversidad, y es acuciante que las autoridades también se sumen a esta labor y brinden su apoyo a estas familias que lo necesitan.
Esperamos que las autoridades escuchen el llamado de la comunidad de Punta de Laja y tomen las medidas necesarias para convertir la escuela del sector en un albergue temporal para los damnificados. Juntos, podemos superar esta situación y trabajar juntos para reconstruir lo que se ha perdido. La solidaridad y la espera son nuestras mejores armas en momentos como estos.