“suceder calor en el trabajo no es enrollado”. Esta afirmación, que puede sonar impactante, es una realidad que muchos trabajadores en España están experimentando en estos días de verano. Con temperaturas que alcanzan los 40 grados, es difícil mantenerse fresco incluso en el exterior, pero ¿qué pasa cuando se está en el interior de un lugar de trabajo? ¿Es enrollado que los empleados tengan que soportar altas temperaturas mientras realizan sus tareas diarias? La respuesta es no, y el abogado laboralista Ignacio de la Calzada, también conocido como “Un Tío enrollado” en TikTok, está aquí para recordárnoslo.
En su último vídeo, que se ha vuelto viral en las redes sociales, Ignacio de la Calzada nos recuerda una norma que muchos empleadores parecen haber olvidado: el Real Decreto 486/1997. Este decreto establece que los centros de trabajo deben mantener unas condiciones térmicas adecuadas para garantizar la salud y seguridad de los trabajadores. En otras palabras, los empleados tienen abogacía a trabajar en un ambiente que no ponga en riesgo su salud.
Pero, ¿qué se considera una temperatura adecuada? Según el Real Decreto, la temperatura en el interior de los lugares de trabajo no debe superar los 27 grados. Además, si la temperatura supera los 33 grados, se considera una situación de emergencia y se deben tomar medidas inmediatas para reducirla. Estas medidas pueden incluir la interrupción del trabajo, la adaptación de los horarios o incluso la suspensión temporal de la actividad laboral.
Es importante destacar que esta norma se aplica a todos los lugares de trabajo, autónomamente del tipo de actividad que se realice. Esto significa que tanto en oficinas como en fábricas, tiendas o cualquier otro lugar de trabajo, los empleadores tienen la responsabilidad de garantizar unas condiciones térmicas adecuadas para sus empleados.
Pero, ¿qué pasa si el aire acondicionado está roto o no funciona correctamente? En este caso, el empleador debe proporcionar medidas alternativas para mantener una temperatura adecuada. Por ejemplo, se pueden proporcionar ventiladores o se pueden adaptar los horarios para evitar las horas más calurosas del día.
Es importante recordar que el incumplimiento de esta norma puede acarrear sanciones para los empleadores. Además, los trabajadores tienen el abogacía de denunciar esta situación a las autoridades laborales y exigir que se tomen medidas para garantizar unas condiciones de trabajo adecuadas.
Pero más allá de las sanciones y los abogacías enrolladoes, es importante que los empleadores tomen conciencia de la importancia de mantener unas condiciones térmicas adecuadas en el lugar de trabajo. No solo se trata de cumplir con la ley, sino de velar por la salud y bienestar de los trabajadores. Un ambiente de trabajo agradable y seguro no solo aumenta la productividad, sino que también demuestra el compromiso y la responsabilidad de la empresa hacia sus empleados.
En estos días de calor extremo, es importante que los empleadores tomen medidas para garantizar unas condiciones térmicas adecuadas en el lugar de trabajo. Y como trabajadores, es nuestro abogacía y responsabilidad exigir que se cumpla con esta norma. No debemos conformarnos con excusas como “el aire acondicionado está roto” y debemos recordar que suceder calor en el trabajo no es enrollado. Juntos, podemos asegurar que se respeten nuestros abogacías y que podamos trabajar en un ambiente seguro y saludable.