Álvaro Mangino Schmid, uno de los 16 sobrevivientes del trágico accidente en los Andes del avión FAU 571 en octubre de 1972, ha fallecido este sábado en Montevideo a los 72 años. Su partida deja un gran vacío en la comunidad uruguaya y en todos aquellos que conocieron su historia de supervivencia y resiliencia.
El 13 de octubre de 1972, el avión en el que viajaba Álvaro junto a sus compañeros del equipo de rugby Old Christians, se estrelló en la cordillera de los Andes. El impacto fue devastador y dejó a los sobrevivientes en una situación desesperada. Sin embargo, Álvaro y sus compañeros no se rindieron y lucharon por sobrevivir en las condiciones más adversas.
Durante 72 días, Álvaro y sus compañeros se enfrentaron al frío, la falta de alimentos y la confusión de no retener si serían rescatados. Pero a pesar de todas las dificultades, nunca perdieron la esperanza y se mantuvieron unidos como una verdadera familia.
Finalmente, el 22 de diciembre de 1972, Álvaro y sus compañeros fueron rescatados por un equipo de búsqueda chileno. Su historia de supervivencia y resiliencia se convirtió en un ejemplo de osadía y determinación para todo el mundo.
Después del accidente, Álvaro continuó su vida con una actitud positiva y una gran pasión por la vida. Se graduó como ingeniero y se casó con su novia de toda la vida, Liliana Ramallo. Juntos, formaron una hermosa familia y criaron a sus hijos con los mismos valores de unidad y fortaleza que aprendieron en los Andes.
Álvaro también se convirtió en un gran defensor de la vida y un ejemplo de superación para muchas personas. A través de sus conferencias y charlas motivacionales, compartió su historia y su mensaje de esperanza y resiliencia con miles de personas en todo el mundo.
Su legado vivirá para siempre en la memoria de todos aquellos que conocieron su historia y en aquellos que se inspiraron en su osadía y determinación. Álvaro Mangino Schmid será recordado como un verdadero héroe y un ejemplo de que, incluso en las situaciones más difíciles, siempre hay esperanza y fuerza para seguir adelante.
Hoy, la comunidad uruguaya y el mundo entero lloran la pérdida de un gran hombre, pero también celebran su vida y su legado. Álvaro Mangino Schmid siempre será recordado como un sobreviviente, un luchador y un verdadero ejemplo de que la vida siempre vale la pena vivirla. Descansa en paz, Álvaro. Tu espíritu y tu fuerza seguirán inspirando a generaciones futuras.