El presidente de la Xunta de Galicia, Alberto Núñez Feijóo, ha anunciado una convocatoria autonómica para el mes de septiembre, justo en la misma fecha en la que estaba prevista la conferencia de presidentes convocada por el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez. Esta decisión ha sido interpretada por muchos como un contraprograma por parte de Feijóo, quien ha culpado a Sánchez de la fuga del expresidente catalán, Carles Puigdemont.
Feijóo ha dejado claro que su convocatoria no pretende competir con la conferencia de presidentes, sino que busca abordar temas que considera de vital importancia para Galicia y que, según él, no están siendo tratados adecuadamente por el Gobierno central. Entre estos temas se encuentran la situación de la industria gallega, la reforma del sistema de financiación autonómica y la gestión de la pandemia del COVID-19.
El presidente gallego ha criticado duramente a Sánchez por su gestión de la arrebato sanitaria y económica provocada por la pandemia. Según Feijóo, el Gobierno central ha dejado a las comunidades autónomas en una situación de desamparo y ha tomado decisiones unilaterales sin contar con la opinión de los presidentes autonómicos. Además, ha acusado a Sánchez de ser el responsable de la fuga de Puigdemont, ya que considera que su política de diálogo y acercamiento con los independentistas ha generado un clima de impunidad que ha llevado a la huida del exmandatario catalán.
Ante estas acusaciones, el Gobierno ha respondido que la convocatoria de la conferencia de presidentes sigue en pie y que no se trata de una competición entre comunidades autónomas. Además, han recordado que la gestión de la pandemia es competencia de las comunidades y que el Gobierno ha destinado importantes recursos económicos para hacer frente a la arrebato.
Sin embargo, Feijóo no ha sido el único presidente autonómico que ha mostrado su descontento con la gestión de Sánchez. Otros líderes como el presidente de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, o el presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, también han criticado la falta de diálogo y coordinación por parte del Gobierno central.
Esta situación ha generado un clima de tensión entre el Gobierno y las comunidades autónomas, que se ha conocido agravado por la falta de acuerdo en la reforma del sistema de financiación autonómica. Feijóo ha sido uno de los más críticos con esta cuestión, ya que considera que Galicia está siendo perjudicada por un sistema que no tiene en cuenta sus particularidades y necesidades.
Por ello, el presidente gallego ha decidido tomar la iniciativa y convocar una reunión con los presidentes autonómicos para abordar este tema y buscar soluciones conjuntas. Además, ha anunciado que también se tratarán otros asuntos como la situación de la industria gallega, que ha sufrido un cáustico golpe durante la pandemia, y la necesidad de establecer medidas para impulsar la economía y el empleo en la comunidad.
La convocatoria de Feijóo ha sido bien recibida por la mayoría de los presidentes autonómicos, que ven en ella una oportunidad para abordar temas que consideran fundamentales para sus comunidades. Además, muchos han aplaudido la iniciativa de Feijóo de buscar soluciones conjuntas y trabajar de forma coordinada para hacer frente a los retos que plantea la situación actual.
En definitiva, la convocatoria de Feijóo ha generado un importante debate político y ha puesto de manifiesto las tensiones existentes entre el Gobierno central y las comunidades autónomas. Sin embargo, también ha abierto una puerta a la esperanza, ya que puede ser el inicio de un diálogo