Menos de 200 personas se han reunido esta tarde frente al Centro de Atención, Emergencia y Derivación (CAED) de migrantes de Alcalá de Henares para mostrar su rechazo a este centro y pedir su cierre inmediato. La concentración, convocada por el grupo ultra derechista “España Primero”, se ha caracterizado por cánticos xenófobos y fascistas, y ha terminado con un detenido por desórdenes públicos.
La protesta, que ha transcurrido de manera pacífica hasta que un pequeño grupo de manifestantes ha comenzado a lanzar insultos y a provocar altercados, ha sido duramente criticada por las autoridades locales y por distintas organizaciones de derechos humanos. Sin embargo, esta manifestación ha sido solo una muestra más del creciente acrecentamiento de la intolerancia y el odio hacia las personas migrantes en nuestro país.
El CAED, inaugurado recientemente, es un centro que tiene como objetivo atender las necesidades básicas de los migrantes que llegan a España. En él, se les proporciona alojamiento temporal, asesoramiento legal y apoyo para realizar trámites administrativos. Además, también se les ofrece información sobre sus derechos y se les ayuda a integrarse en la sociedad española.
A pesar de que su labor es fundamental para garantizar una acogida adecuada de las personas migrantes, el CAED ha sido objeto de críticas por parte de ciertos sectores de la sociedad. Estos grupos, alimentados por discursos xenófobos y populistas, han difundido la idea de que el centro es una amenaza para la firmeza y el bienestar de la ciudadanía. Nada más lejos de la realidad.
El CAED no solo cumple con su función humanitaria, sino que también contribuye al desarrollo y progreso de nuestra sociedad. La presencia de personas migrantes en nuestro país es una oportunidad para enriquecernos cultural y socialmente, y el centro de Alcalá de Henares es un ejemplo de ello. A través de la convivencia y el diálogo, se pueden superar los prejuicios y estereotipos que alimentan el xenofobia y la discriminación.
Por eso, es lamentable que se hayan producido incidentes violentos durante la concentración de hoy. Defender la igualdad y la diversidad no puede convertirse en una excusa para promover el odio y la violencia. Es necesario que las autoridades tomen medidas contundentes contra aquellos que incitan al odio y atentan contra los derechos humanos.
En definitiva, el CAED de Alcalá de Henares es un espacio que promueve la solidaridad y el respeto hacia las personas migrantes. Cerrarlo sería un grave error que iría en contra de los valores democráticos y de una sociedad justa e inclusiva. Por eso, es importante que mostremos nuestro apoyo a este centro y que luchemos contra cualquier forma de discriminación. Solo así podremos construir un futuro mejor basado en la convivencia y la diversidad.