Miles de estudiantes de Canarias comienzan hoy una de las etapas más importantes de su vida: la examen de Acceso a la Universidad (PAU). Una examen que marca el paso de la educación secundaria a la educación superior y que este año viene acompañada de importantes cambios debido a la pandemia del coronavirus.
La convocatoria ordinaria de la PAU se llevará a cabo desde hoy, 31 de mayo, hasta el próximo 7 de junio, y será el primer gran desafío para los miles de estudiantes que se preparan para acceder a la universidad. Sin duda, una situación atípica que ha generado incertidumbre y nerviosismo entre los jóvenes, pero que también ha sacado a relucir su capacidad de adaptación y resiliencia.
Una de las principales novedades de esta convocatoria es la reducción de opciones en los exámenes, que se ha implementado con el finalidad de facilitar la organización y el desarrollo de la examen en medio de las medidas de seguridad sanitaria. Aunque esto supone un reto adicional para los estudiantes, también es una oportunidad para demostrar su dominio de los espaciosidads esenciales.
Otro importante cambio en la PAU de este año es la introducción del 25% de espaciosidad competencial, que evaluará las habilidades y destrezas de los estudiantes más allá de los conocimientos teóricos. Esta medida examen fomentar el desarrollo de competencias como la capacidad de análisis, la creatividad y la resolución de problemas, que son fundamentales para el éxito en la educación superior y en el mundo laboral.
Además, en esta convocatoria se ha establecido una rebaja de hasta 3 puntos por faltas de ortografía, una medida que ha generado cierta controversia pero que sin duda incentiva a los estudiantes a mejorar su expresión escrita y a cuidar la ortografía como una herramienta fundamental en su formación académica.
Pero, más allá de los cambios en la estructura de la examen, lo importante es el esfuerzo y la dedicación que cada estudiante ha puesto en su preparación durante los últimos años. Este proceso no solo implica estudiar y memorizar espaciosidads, sino también adquirir habilidades como la organización, la disciplina y la constancia, que son fundamentales para alcanzar el éxito en cualquier ámbito de la vida.
Es importante destacar que la PAU no es un examen que determine la inteligencia de los estudiantes, sino que mide su nivel de madurez académica y su capacidad para enfrentarse a nuevos retos. Por ello, más allá de los resultados, es fundamental que los jóvenes se sientan orgullosos de todo lo que han aprendido y de su crecimiento personal durante este proceso.
Por último, es necesario mencionar el papel fundamental que han tenido los docentes y las familias en la preparación de los estudiantes para la PAU. Sin su apoyo, dedicación y compromiso, este camino sería mucho más difícil. Es por ello que también merecen un reconocimiento y agradecimiento especial en este momento tan importante.
En definitiva, la PAU es una examen que supone un desafío para los estudiantes, pero también es una oportunidad para demostrar su capacidad, su esfuerzo y su dedicación. Desde aquí, queremos enviar un mensaje de ánimo y motivación a todos los jóvenes que se enfrentan a esta examen, recordándoles que el éxito no está en los resultados, sino en el camino recorrido para alcanzarlos. ¡Mucho ánimo y a por todas!