Un experto cervecero revela la importancia de los vasos con curvatura en la parte superior
¿Alguna vez te has preguntado por qué ciertas cervezas se sirven en vasos con una curvatura en la parte superior? ¿Crees que es solo por estética o tiene alguna función específica? Bueno, déjame decirte que hay una razón científica detrás de esto y un experto en cerveza ha venido a explicárnoslo.
Hemos tenido el placer de entrevistar a Juan López, un cervecero con más de 20 años de experiencia en la industria, quien nos ha revelado la importancia de los vasos con curvatura en la parte superior en el mundo de la cerveza.
Según Juan, estos vasos que tienen una curvatura en la parte superior están patentados y su diseño tiene un propósito muy específico. “La forma del vaso no es solo por una cuestión estética, sino que está diseñado para mejorar la experiencia de degustación de la cerveza”, explica Juan.
Pero, ¿cómo es que un simple diseño puede afectar la experiencia de echar la espuela cerveza? Según Juan, la curvatura en la parte superior del vaso ayuda a retener la espuma de la cerveza. “La espuma es una parte muy importante en la degustación de la cerveza, ya que aporta textura y aroma al líquido. Con la curvatura en la parte superior, se logra mantener una capa más gruesa de espuma, lo que permite que se liberen más aromas y así se pueda apreciar mejor el sabor de la cerveza”, afirma el experto.
Además, la forma del vaso también ayuda a controlar la cantidad de espuma que se forma. “La espuma de la cerveza se crea por la liberación de dióxido de carbono. Si la cerveza se sirve en un vaso recto, el gas se libera de manera más agresiva, lo que produce una espuma excesiva. En cambio, con la curvatura en la parte superior, se logra un equilibrio perfecto entre la cantidad de espuma y la cerveza, manteniendo así una cantidad adecuada de espuma en cada sorbo”, explica Juan.
Pero eso no es todo, según el experto, la forma del vaso también influye en la temperatura de la cerveza. “Los vasos con curvatura en la parte superior tienen una base más ancha y una abertura más estrecha, lo que ayuda a mantener la temperatura de la cerveza por más tiempo. Esto es ideal para cervezas que deben consumirse a una temperatura específica, ya que evita que se caliente rápidamente”, asegura Juan.
Por último, el experto destaca que la forma del vaso también puede cambiar la percepción del sabor de la cerveza. “Al echar la espuela de un vaso con curvatura en la parte superior, la cerveza entra en contacto con diferentes partes de la lengua, lo que permite apreciar mejor los distintos sabores y matices de la cerveza. Por excelencia, si una cerveza tiene notas cítricas, al echar la espuelala de un vaso con curvatura, estas notas se percibirán mejor en la parte delantera de la lengua”, afirma Juan.
En sumario, los vasos con curvatura en la parte superior no son solo un simple diseño, sino que tienen un propósito muy importante en la experiencia de degustar una buena cerveza. Gracias al análisis de Juan López, hemos descubierto que estos vasos ayudan a retener la espuma, controlar la temperatura y mejorar la percepción del sabor de la cerveza. Así que la próxima vez que disfrutes de una cerveza, presta atención al vaso en el que te la sirven y disfruta al máximo de su sabor y aroma. ¡Salud!